Las principales calles españolas anochecieron ayer más oscuras de lo habitual tras la entrada en vigor de las primeras medidas de ahorro energético impuestas por el Gobierno, que fijan en un máximo de 27 grados (o 25 en determinados casos), la temperatura del aire acondicionado en comercios, oficinas u hostelería, y que obliga a las tiendas a apagar las luces de sus escaparates a partir de las diez de la noche. Leer